A la vuelta de nuestras vacaciones navideñas una sorpresa nos estaba esperando en clase: Los Reyes Magos también habían pasado por el colegio y nos habían dejado un regalo. Al abrirlo nos quedamos de lo más sorprendidos, y es que nos habían dejado un montón de disfraces y accesorios con los que jugar en clase.
Al día siguiente, y en mitad del patio, de repente, una música comenzó a sonar. Esta vez fueron nuestras profesoras las que nos sorprendieron con un Flasmob. Al principio nos quedamos atónitos y no sabíamos lo que pasaba, pero luego nos explicaron que íbamos a comenzar un nuevo proyecto relacionado con el arte en su expresión musical y corporal. Aprendimos que con nuestro cuerpo podemos expresar un montón de cosas, y desde luego que ese día todos nos divertimos un montón y expresamos muchíiiiiisima alegría.
Pero las sorpresas no terminaron ahí.
El tercer día encontramos una caja en clase con un montón de objetos blancos y negros.
No sabíamos de quien podían ser, hasta que al final nos contaron que eran de un Mimo.
Hemos empezado el trimestre y el proyecto con muchas ganas e ilusión por aprender muchas cosas de la expresión corporal y musical.
¿Nos ayudáis?